Los últimos informes correspondientes al primer trimestre de 2024 señalan que la motivación y el compromiso de los empleados han caído a solo el 30%, los niveles más bajos de los últimos 11 años. La mayor disminución de la motivación se da entre las generaciones más jóvenes y entre quienes trabajan únicamente de forma remota o únicamente desde la oficina.
¿Por qué está pasando esto? ¿Cómo pueden los gerentes y dueños de negocios ayudar a los empleados a mantenerse motivados? Analicemos a fondo la situación.
Primero lo primero: ¿por qué está bajando el interés entre los empleados?
Un aspecto importante a considerar es la brecha generacional. Hoy en día, la Generación Z tiene una mentalidad diferente hacia el desarrollo profesional frente a sus predecesores. Se preocupan más por cosas como encontrarle un significado a su trabajo más que simplemente ganar dinero o avanzar en la carrera profesional de forma habitual. Esto puede confundir a los gerentes que esperan que los empleados más jóvenes quieran las mismas cosas que ellos una vez quisieron cuando se insertaron por primera vez en el mundo laboral. Sin embargo, esta expectativa muchas veces choca con la realidad.
Para jóvenes de 20 a 25 años, la sensación de realización personal tiene prioridad sobre los indicadores tradicionales de éxito. Es probable que factores macroeconómicos, como la depreciación del dinero, influyan en este cambio de actitud. Ganar dinero no parece tan importante para los jóvenes, dado su valor cada vez menor.
Entonces, ¿qué se puede hacer para contrarrestar esto y mantener a las personas comprometidas en su lugar de trabajo? Aquí hay algunas ideas que los líderes empresariales pueden tener en cuenta.
1. Empoderar a los empleados, fomentar la responsabilidad
Intenta otorgar a los empleados más control sobre su entorno y horario de trabajo. En la empresa “global payments platform Mercuryo”, adoptaron un modelo de trabajo híbrido donde los trabajadores pueden elegir su formato de trabajo preferido. Esto significa que los empleados pueden elegir si trabajar desde casa o venir a la oficina y el horario en el que trabajan. Esta flexibilidad ayuda a las personas a trabajar cuando se sienten más productivas y promueve una cultura de confianza y responsabilidad propia.
Este enfoque a menudo se denomina enfoque ROWE (“Results-Only Work Environment” o entorno de trabajo centrado únicamente en resultados). En lugar de observar de cerca a los empleados y controlarlos, nos centramos en los resultados que logran. Confiamos en nuestro equipo para gestionar su carga de trabajo y hacer las cosas. Esta forma de hacer las cosas ayuda a equilibrar la vida laboral y personal y hace que las personas se sientan más responsables, productivas y felices en su trabajo.
2. Crear un entorno dinámico para cultivar el crecimiento entre los trabajadores.
Otra idea es crear un entorno dinámico donde los empleados se sientan desafiados y animados a crecer. Esto significa crear un listado de tareas opcionales que evite ahogar a sus trabajadores en la misma rutina todos los días. Por supuesto, algunas tareas operativas son necesarias para que una empresa funcione sin problemas. Pero es igualmente crucial brindar oportunidades a sus empleados para que amplíen sus habilidades y enfrenten nuevos desafíos por medio de la realización de tareas nuevas.
Los gerentes desempeñan un papel clave en este enfoque, ya que son responsables de formar y seleccionar este grupo de tareas. Deben asegurarse de que cada miembro del equipo tenga una combinación de tareas en las que sea bueno y tareas que le ayuden a aprender y crecer. De esta manera, los gerentes pueden hacer que el trabajo sea más interesante para su equipo y mantenerlos motivados y comprometidos.
3. Aprovecha las actividades compartidas de equipo para crear un sentido de comunidad.
Otra táctica que quizás desees considerar es fomentar la camaradería y los intereses compartidos entre los miembros del equipo. Puedes lograrlo organizando diversas actividades y eventos que unan a los empleados. Las misiones en la oficina, los desafíos deportivos, las reuniones y las celebraciones navideñas son formas excelentes de cultivar un sentido de comunidad y pertenencia.
Las experiencias compartidas brindan oportunidades para la interacción social y también promueven el trabajo en equipo, la creatividad y el apoyo mutuo. Esto da como resultado un ambiente de trabajo positivo y relaciones más sólidas dentro del equipo.
4. Aceptar la diversidad cultural y valorar el equilibrio entre la vida personal y laboral
Finalmente, ser líder de una empresa significa prestar atención a las diversas mentalidades y valores culturales dentro de su equipo, especialmente cuando se opera en el escenario internacional. Comprender y respetar las diferencias culturales, particularmente en lo que respecta al concepto de equilibrio entre la vida laboral y personal, es crucial cuando se intenta crear un entorno laboral de apoyo.
La empresa “global payments platform Mercuryo” tiene miembros repartidos por todo el mundo, cubriendo los EE. UU., Europa y Asia. Con un equipo tan multicultural, allí se reconoce que las actitudes hacia el equilibrio entre la vida laboral y personal pueden variar ampliamente entre regiones. Los líderes deben adoptar un enfoque flexible y empático que respete los valores y límites individuales de los empleados.
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